¿Cuánto nos podemos deducir?
- Puedes deducirte el 20% de lo que hayas invertido en 2022 en comprar acciones o participaciones sociales debido a la creación de una nueva empresa o a la ampliación de capital de una ya existente.
- El máximo que te puedes deducir es 4.000 euros.
Requisitos
- La empresa en la que inviertes, ya sea Sociedad Anónima, Sociedad Limitada, Sociedad Anónima Laboral o Sociedad Limitada Laboral, debe tener su domicilio oficial (social y fiscal) en Aragón.
- Puedes formar parte del consejo de administración de la empresa en la que has invertido, pero no puedes realizar funciones ejecutivas ni de dirección, ni trabajar para esa empresa de ninguna otra forma.
- La deducción depende del cumplimiento de ciertas reglas y límites que se especifican en el artículo 68.1 de la Ley del IRPF.
Cosas a tener en cuenta
- Si vendes las acciones o participaciones y decides usar un beneficio fiscal que te permite no pagar impuestos por las ganancias que obtuviste con esa venta (siempre y cuando reinviertas ese dinero en una nueva empresa o una de reciente creación), solo podrás deducirte por la parte de tu reinversión que supera lo que ganaste con la venta.
- Incompatibilidades: Si usas esta deducción, no puedes usar, para la misma inversión, la deducción «Por inversión en acciones de entidades que cotizan en el segmento de empresas en expansión del Mercado Alternativo Bursátil» y tampoco la deducción «Por inversión en entidades de la economía social».
- Documentación: Si quieres solicitar esta deducción, es importante llenar una sección específica en tu declaración de impuestos, el apartado «Información adicional a la deducción autonómica por inversión en la adquisición de acciones y participaciones sociales en entidades nuevas o de reciente creación» del Anexo B.8. Ahí deberás informar cuánto invertiste y el número de identificación (NIF) de la empresa nueva o de reciente creación.
- Pérdida del beneficio: Si no cumples con las reglas y requisitos, perderás el beneficio fiscal, y deberás pagar lo que te dedujiste más los intereses por el tiempo que ha pasado.
En resumen, este beneficio fiscal te incentiva a invertir en empresas nuevas o que están creciendo. Sin embargo, hay ciertas condiciones y límites que debes cumplir para aprovecharlo.
